Cuando somos jóvenes expresamos nuestros sentimientos de manera más apasionada, expresiva y desmedida. Nos enamoramos, ilusionamos, reímos, lloramos y nos lanzamos a la vida como no lo haremos en ninguna etapa de nuestras vidas. Pero no sólo estos sentimientos y experiencias se intensifican sino también LOS CELOS. No sé si será por nuestra inmadurez pero cuando somos jóvenes somos más celosos. Nos hacemos los muy maduros y serenos cuando vemos a nuestra flaca hablar con otro pata que no conocemos pero por dentro queremos que muera el desgraciado. Y peor aun cuando un pata, de esos gigantes que no deberían existir, esos que parece que comieran ladrillo y que en su biberón tomaban cemento creo, de esos que parecen gorilas, quieren afanar a nuestra flaca. Lo vemos nada más y “¿QUÉ TE PASA IMBÉCIL?” pensamos porque si lo decimos nos mata el maldito gigante. Pero cuando nos hartamos que ese gorila este queriendo afanar a nuestra flaca, ya perdemos el control, nos paramos y…NOS VAMOS DEL LUGAR porque ni fregando nos mechamos con la montaña de músculos. Pero esto normalmente pasa con los hombres porque la verdad somos muy inseguros. Esto no es nada más que la verdad, si vemos uno de esos patas que sabemos que son guapos (no lo reconocemos para no sentirnos gays) comenzamos a sentir celos si son amigos de nuestra enamorada o de la chica que nos gusta. Es por el simple hecho de no estar seguros de nuestras capacidades y cualidades. Y ni siquiera cuando pasa el pata lo queremos ver porque es tanta nuestra inseguridad que tenemos miedo a que no llegue a gustar el brother. Pero ahora me pueden decir los hombres “ESTO NO ES VERDAD” o “¿DE QUÉ HABLAS ANORMAL?” pero todos saben que de una manera u otra es verdad. Sólo que con el tiempo aprendemos a manejar nuestros celos y maduramos poco a poco. Pero en cambio es raro encontrar a una chica muy celosa pero cuando la encuentras TEN MIEDO. Nosotros los hombres podemos ser más expresivos y tontos al ser celosos pero las mujeres SON MAQUIVÉLICAS. Y si esos celos femeninos se juntan con esos días “delicados” MORIRÁS. Así que ten cuidado si eres hombre y te gusta vivir. Pero en fin, cuando maduras y vas obteniendo más experiencia, seas hombre o mujer, aprendes a manejar tus celos y a confiar más en la persona que amas.
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