De niños creo que absolutamente todos hemos visto dibujos animados. Estos dibujos siempre tenían algo mágico o interesante que captaba toda nuestra atención a tal punto que todos los días estábamos atentos a los nuevos capítulos de dicho dibujo. Cada uno de nosotros tuvo su serie animada favorita según sus gustos e ilusiones; muchas de las chicas eran fanáticas de Candy, Mafalda, etc. Pero de los hombres es casi un patrón general que las dos series animadas favoritas sean Dragon Ball y/o SUPERCAMPEONES. ¿Quién no ha visto SUPERCAMPEONES? Almenos un 95% de nosotros lo ha visto. Yo era de los más fanáticos cuando era pequeño. Pero conforme fui creciendo y comenzando a madurar (aunque no lo crean SI maduré desde los 6 años, bueno almenos alguito) fui dándome cuenta que no todo era hermoso y bello en ese dibujo. Me di cuenta que tenían que pasar tres capítulos para que Oliver llegue al maldito arco, corría como un condenado y nunca acaba la cancha. Para el colmo, el corría y la que avanzaba era la cancha, parecía que el idiota estaba en una de esas caminadoras de gimnasio y no en una cancha de fútbol. Y peor aún, ahora cuando escuchas las conversaciones que Oliver tenía con sus amigos te das cuentas que mucho de lo que decía era extremadamente gay como: “Tom recién te conocí hoy pero siento que te conozco de toda la vida”, “Bengie no te vallas, nada será lo mismo sin ti” o “Roberto gracias por todo lo que viví contigo pero ya es hora que tome mi camino y me aleje de ti”. Y como para dudar más de su virilidad, Patty (la hincha de Oliver) siempre estuvo atrás y atrás de él pero nunca le hizo ni caso; aunque es aceptable porque esa flaca era de aquellas obsesionadas maniacas pero tampoco ni se le vio con otra flaca. Otro punto que te das cuenta es que para que Oliver patee o haga su chalaca siempre tenía que recordar toda su vida. Oliver se elevaba durante dos capítulos, pasaban aviones a su lado y el seguía recordando cada parte de su vida desde que nació hasta llegar a ese gol. Pero lo que más me sorprendía no era Oliver sino las piruetas, sonseras y otros personajes de la serie. Como los hermanos Korioto que uno le pisaba la cabeza al otro para luego dar una vuelta en el aire y patear para que el hermano al que le pisó la cabeza llegue y patee. También las tapadas de Bengie Price que se impulsaba en el palo derecho, travesaño y palo izquierdo para tapar un tiro que iba al centro. O también esos patas que defendían en contra de Oliver que tenía como dos metros y estaban en primaria. Pero nadie puede negar que lo más sorprendente de la serie fue su final. Aunque nunca lo pasaron en nuestro país pero fue que al comienzo de la serie cuando supuestamente el balón de fútbol salvó a Oliver de ser atropellado NO FUE ASÍ SI LO ATROPELLARON. TODO FUE UN MALDITO SUEÑO, NO CONOCIÓ A TOM NI A BENGIE NI NADA, ESTABA EN COMA Y LE AMPUTARON LAS PIERNAS. Y CUANDO OLIVER DESPIERTA DEL COMA Y GRITA MAMÁ GANAMOS EL MUNDIAL SU MAMÁ LE DICE: “NO HIJITO ESTÁS COJO” Y EL LLORA DESCONSOLADAMENTE Y ACABA. Acabo de destruir muchas ilusiones e infancias al contar ese final y sólo me queda decir NO ME IMPORTA. Espero no haber herido ninguna susceptibilidad al mostrar la verdad tal como es sobre SUPERCAMPEONES y que compartan está verdad con todos sus amigos. Muchas Gracias por su atención.
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